miércoles, enero 12, 2005

La Cúpula entra con Fuerza



Tras las primeras tentativas con el mundo oriental el año pasado, parece que a la editorial catalana le ha parecido rentable el comic asiático. Prueba de ello es la avalancha de nuevos títulos coreanos que tienen preparados así como varios títulos yaoi, centrados en el amor entre hombres y en el comic coreano:


En enero Play boy blues, de Shiuko Kano, un tomo único yaoi, en febrero Kiss me, kill me de Lee Young Yuu, cinco tomos de un shojo aparentemente adolescente y Yellow, de Makoto Tateno, otro manga yaoi de 5 tomos, en marzo, saldrá Model, de So Young Lee, 7 tomos en una historia de misterio con toques fantástico, el cuarto número de Tarot cafe y la tercera edición de Memorias de Otomo, en Abril, sacarán otro manwha, Chonchu, de Sung Jae Kim y Byung Jin Kim, con 15 tomos y Furimukudakede anata tsumina otoko, de Tarako Kotobuki, otro yaoi más, en mayo saldrá el segundo número de Enomoto, en Junio La Serpiente Roja de Hideshi Hino y en octubre The Bug Boy del mismo autor.

La entrada con fuerza de la editorial catalana parece bien reflexionada. Se basa en historias para todos los géneros pero, sobre todo, para el género femenino, con títulos yaoi, que suelen tener contenidos eróticos unas veces y otras veces sexo explícito, y luego unos títulos coreanos de estética clarametne orientada hacia ese público. Además, no olvidan lo que realmente ha sido característico en el recorrido de la editorial, la publicación de autores más de culto, con la aparición de dos tomos de Hideshi Hino, la continuación de Enomoto y la reedición del Memorias de Otomo. Todo ello parece formar una apuesta en toda regla para un nuevo mercado en el que La Cúpula no se había acercado hasta ahora. El principal problema que encontrarán en este nuevo mercado, es la furibunda exigencia de periodicidad de sus seguidores, cosa con la que tampoco suelen deslumbrar, a eso añadiéndole unas ediciones bastante peores y más caras de lo que se encuentra entre el manga, pueden resultar dos escollos graves que no puedan salvar. A ver si tienen suerte.